Por Mauricio
Vargas Herrera y Juan Camilo Suárez Galindo.
(Basado
en el tema «Masacre en el puticlub»)
¿Es bella no? Es hermosísima. Creo que ya te cansaste
de escucharlo, ¿no, amigo? Por eso sigo viniendo. Por eso es que me ves aquí
todos los viernes. Desde aquí todo se ve perfectamente. Cuando sale, envuelta
en ese ondeante traje blanco. Te lo digo, nunca he visto una chica así en toda
mi vida, y créeme, he visto un montón de chicas. Me he acostado con buena parte
de ese montón. Pero ninguna se compara a ella. Nadie tiene lo suficiente para
pararse en ese escenario, amigo. Sírveme otra. Eso, gracias. Pura ambrosía para
el hígado. Aaahhh, otra. Necesito tomarme mis pastillas. Llénalo. Gracias.
Aaahhh, entra derecho. ¿Qué hora tienes? ¡Vaya, se pasa el tiempo volando! Ya
casi sale. Cuestión de minutos. Me encanta el preámbulo, cuando apagan las
luces y ella va saliendo. Me fascina. Aunque ella no debería estar clavada en
este antro lleno de alimañas. No es por ti, amigo. No tienes la culpa, al fin y
al cabo. Pero no puedes negar que esto es un maldito hueco pestilente. Y mira a
todos esos hijos de perra que están allá. Escorias. Aguardando a que ella les
roce la mejilla con su mano. Como si tuvieran alguna oportunidad. No, ella no
está para eso. Merece más. ¿Sabes? He venido todos estos días analizando la cuestión. Quiero
llevármela. ¿Has observado cómo me mira? Le he estado enviando a su casa
algunos detallitos. Sabe que me gusta lo que hace, aunque me gustaría más que
lo hiciera en mi habitación jejejejeje. Por eso no tengo necesidad de irme a
parar allá adelante. Ya me conoce. Quiero sacarla de aquí. Es una perra, lo sé.
Una maldita zorra, pero es una zorra inmaculada a la que quiero hacérselo todos
los días, mañana, tarde y noche jejejeje. Es una tontería enamorarse de una
chica de esas. Pero vale la pena intentarlo, ¿no? Recuerdo una película, de
unos soldados que encontraban un dinero ilegal enterrado en el campo. ¿La
viste? Sí, que uno de ellos se enamoraba de la puta del club ese, le ofreció
todo, quería irse a vivir con ella, se la durmió esa noche y al siguiente día
lo dejó en la ruina, se escapó con los billetes jajajajaja. ¡Vaya infeliz de
mierda ese! A mí no me pasará eso. Quiero sacarla de aquí y lo haré cueste lo
que cueste. Qué dices, chico, ¿te parece una buena idea? Sí, ya sé que es hija
del dueño de toda esta cueva asquerosa. Pero hoy tengo a mis aliadas aquí
conmigo. Ya armé un plan. ¿Trajiste pantalones de repuesto? Porque en breve te
vas a cagar, literalmente. Shhh, shhh, mira, ahí sale. Oh, sí, bella como
siempre. Mira qué porte, qué sensualidad. Quiero ser ese traje blanco. Debe de
oler delicioso. Nunca me canso de verla, ¿tú sí? No lo creo, amigo. Detrás de
esa barra tienes lugar privilegiado. Oh, mira, mira como nos observa. Me está
buscando a mí, jejejeje, lo sabe, soy su salvador. Vaya perra esa. Mi perra. La
amo, maldita sea. Oye la música, es esclava de sus movimientos. Que le suban,
¡que le suban a ese rock! Sí, oh sí, dame otro, quiero mi pastilla. Llénalo
para pasarla. Aaahhh, delicioso. Mira, mira ese pobre sujeto. Se derrite al
verla allí agachada frente a su rostro. Vaya idiota. Y pensar que ahora tendrá
que llegar a casa a ver a su esposa. Ve como me mira desde allá. ¡Muack! ¿Lo
sentiste, preciosa? ¡Mucak! ¡Muack! Hoy es tu día de jubilación. Mañana
bailarás sobre mi cama. Solo tu último movimiento. Eso. Lléname otro, chico,
para la pastilla, ya sabes. Eso sí. Ahhhh. Toma, quédate con el cambio. No, no
abras los ojos así, es solo una retribución por refrescarme el pescuezo y oír mis
tonterías. Aprovéchalo, chico, vete de este moridero también. Ahí te doy
suficiente. Ahora saca tu culo de aquí, a menos que quieras ensuciar tus
pantalones. Y ahora, que comience la verdadera función. Nena, voy por ti.
¡BANG!
¡BANG!
¡BANG!
Un poeta.
ResponderEliminarBrillante, Mauricio, Juan Camilo.
ResponderEliminarMe parece estar ahí, en medio del cabaret, al lado del protagonista, escuchándolo y viendo todo lo mismo que él ve (mérito absoluto de ustedes como autores).
El desenlace es tremendo, inesperado: me encantó.
Los felicito, señores, han estado ¡diez puntos!
Saludos.
jaja buenísimo mauricio!! excelente monólogo. tal cual...
ResponderEliminarsalutes!!!