Muy original en su presentación y muy interesante noticia que promete historias que de seguro no defraudarán, Don Flemming. Tengo el agrado de ser lector de los trabajos de la mitad de este Ka-Tet, y vaticino lo mejor. Mucha suerte con esta empresa.
A los habitantes y merodeadores de La Azotea les quería decir que esta atmósfera que se ha creado es peligrosamente atractiva. Y que la noticia en "The Silent Observer" me ha provocado una ansiedad por saber de qué se trata. Me asusta un poco la idea ésa de no poder bajar, pero no creo que me pueda resistir a visitarlos. Los felicito por el emprendimiento, siempre y cuando tenga buenas intenciones, no sea cosa que terminen cubriendo a los de abajo con efluvios malvados y engañosos. ¡Les deseo muchísimos lectores!
Leo sobre la maldición de las gárgolas y se me ocurre que algún tipo de mal recorre la vena de algunos arquitectos. Todo en la vida se paga, de alguna manera. Los misterios de esta muerte tal vez no se develen, y sea la antesala de repetidas visitas a la morgue. No temo. Subiré a esta azotea y dejaré que la lluvia de ideas me bañe. Si no bajo pronto no se preocupen. Esta presentación es acogedora e invita a quedarse...
Muy original en su presentación y muy interesante noticia que promete historias que de seguro no defraudarán, Don Flemming.
ResponderEliminarTengo el agrado de ser lector de los trabajos de la mitad de este Ka-Tet, y vaticino lo mejor.
Mucha suerte con esta empresa.
A los habitantes y merodeadores de La Azotea les quería decir que esta atmósfera que se ha creado es peligrosamente atractiva. Y que la noticia en "The Silent Observer" me ha provocado una ansiedad por saber de qué se trata. Me asusta un poco la idea ésa de no poder bajar, pero no creo que me pueda resistir a visitarlos. Los felicito por el emprendimiento, siempre y cuando tenga buenas intenciones, no sea cosa que terminen cubriendo a los de abajo con efluvios malvados y engañosos. ¡Les deseo muchísimos lectores!
ResponderEliminarLo s vecinos escondidos en la azotea, tiemblan al pensar lo que se les viene encima.Suerte.
ResponderEliminarbravo, william.
ResponderEliminarexcelente comienzo.
santé!!
Leo sobre la maldición de las gárgolas y se me ocurre que algún tipo de mal recorre la vena de algunos arquitectos. Todo en la vida se paga, de alguna manera. Los misterios de esta muerte tal vez no se develen, y sea la antesala de repetidas visitas a la morgue. No temo. Subiré a esta azotea y dejaré que la lluvia de ideas me bañe. Si no bajo pronto no se preocupen. Esta presentación es acogedora e invita a quedarse...
ResponderEliminarUna presentación que ya está en la páginas de los diarios y que seguramente seguirá dando que hablar. Besosssss Willy!!
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